“Aquella mañana de viernes 17 DE ABRIL Paula no sabía ya ni qué pensar. Se sentía estresada, confundida y con miedo.
En sólo 1 semana había pasado de:
Parecerle ridículo una persona con mascarilla a verlo como algo necesario.
Ver normal el dar un beso, a no poder ni acercar a personas queridas.
Ver una locura cómo en China les confinaban en su casa, a no poder salir de la suya.
Ver como una obligación el ir a natación, a verlo ahora como una necesidad y un lujo inalcanzable.
Y sobre todo, de pasar a tener la sensación de que todos los que te rodean siempre estarán, a sentir que los puedes perder.
Una lista bastante extensa, demasiada extensa para tampoco tiempo.
Paula, con razón se sentía estresada y con miedo. Las noticias están fuera de control, la realidad ha pasado a ser nuestra peor enemiga.”
Cuantas veces he pensado que el centrarse en el pasado crea angustia y el futuro ansiedad. Y vivir el presente es la clave.
En esta ocasión, es bueno evadirse de las noticias y de los acontecimientos al minuto al que estamos sometidos.
Pero también intentemos en la medida de lo posible hacer aquellas cosas que disfrutamos y que seamos sinceros en poco tiempo, cuando todo vuelva a su sitio, ya nunca más podremos hacer.
También ver las cosas con perspectiva nos ayudará a trabajar ahora en objetivos que queramos conseguir en un futuro próximo. En unas semanas, en unos meses todo mejorará y poco a poco podremos ir dando forma a una vida que seguro saborearemos más.
Disfrutaremos en la medida de lo posible de pequeñas cosas que dábamos por hecho.
Yo intento planear mis próximos pasos, ¿Y tú?
Juan Cereijo